En el articulo que antecede a este del mismo titulo dije que al castrismo le hacia falta solo para sobrevivir un guanajo que alimentara su existencia, de modo que desde que triunfó “la revolución” en 1959 hábilmente Fidel ha hecho lo imposible para asegurarse ese guanajo. La Unión Soviética fue el candidato mas adecuado en aquellos años y sin dudarlo una sola vez echó mano de los bolos. Para mantener al guanajo entretenido casi convierte a Cuba en una republica soviética, llegó no solo a donarle la vida de miles de jóvenes cubanos en guerras internacionales sino, que por poco quita la lengua española como idioma oficial en Cuba para poner la rusa, lo intentó, llegó el momento que en lugar de estudiar el idioma inglés como suplemento lingüístico, como en todo en mundo (incluso en la URSS) ordenó que se estudiara la lengua rusa. Todo lo modificó y los soviéticos llegaron a ser una constante en Cuba, lo mismo física que tecnológica. Todo el desarrollo vital de la existencia cubana orbitaba alrededor de La Unión Soviética; el sistema de educación, la salud, la industria, la maquinaria, la política y hasta la dirección militar y de alta prioridad estatal estaba en manos de los soviéticos y/o monitorizada por ellos. Recuerdo que en todos los aspectos de la vida dentro de Cuba había un bolo.
En la Flota Cubana de Pesca donde laboré los primeros años de mi juventud todo era supervisado por los soviéticos, en los barcos, si había un Capitán cubano también había uno ruso, un primero de maquina y de cubierta ruso y uno cubano, un contramaestre, un maestro de redes etc. En cada una de las posiciones claves del barco había a parte de un cubano un ruso, se llegó a montar a bordo de todos los buques cubanos un comisario político soviético. Así fue que en todas las esferas de la vida nacional la existencia de la Unión Soviética era impuesta. Una cultura totalmente opuesta a la cubana fue necesario implantar en Cuba con el único objetivo de asegurar la existencia de Fidel Castro en el poder. Nada resolvió en Cuba el servilismo ni el gran subsidio de cinco mil millones de dólares anuales procedentes del guanajo ruso porque luego de treinta años ese dinero nadie sabe para que sirvió que no fuera para alimentar la maquinaria represiva y propa-gandista cubana.
Pero ese guanajo se dio cuenta después de treinta años que era un pavo ruso y no cubano y todo se vino abajo, el subsidio se acabó y ¿Qué sucedió con los supuestos logros de la revolución cubana? ¡Se vinieron abajo junto con los guanajos rusos! Luego entonces para los castristas, incluso para el propio Fidel los soviéticos eran una partida de canallas, traidores y de tecnología troglodita; el propio Fidel Castro se mofó de los soviéticos denigrando los productos que exportaban para Cuba. A partir de que los guanajos dejaron de regalarle dineros para su exagerada manutención pasaron de ser solidarios, a ser repugnantes traidores e idiotas colorados; así fue que entonces la dirección castrista se dio cuanta que sin los rusos tenían que echar mano a una mutación del sistema capitalista para ver si podían a duras penas encontrar otro guanajo. En ese momento comenzó la dura realidad, sin dinero, sin créditos y sin producción nacional no podrían llegar muy lejos, he ahí que implantaron el “periodo especial en tiempos de paz”, un sistema de castración nacional, de hambruna y falta de todo lo básico para vivir, con la esperanza de no llegar a lo que ya se había calculado que podrían llegar si no se encontraba rápida-mente el próximo guanajo, “La opción cero”.
En la Flota Cubana de Pesca donde laboré los primeros años de mi juventud todo era supervisado por los soviéticos, en los barcos, si había un Capitán cubano también había uno ruso, un primero de maquina y de cubierta ruso y uno cubano, un contramaestre, un maestro de redes etc. En cada una de las posiciones claves del barco había a parte de un cubano un ruso, se llegó a montar a bordo de todos los buques cubanos un comisario político soviético. Así fue que en todas las esferas de la vida nacional la existencia de la Unión Soviética era impuesta. Una cultura totalmente opuesta a la cubana fue necesario implantar en Cuba con el único objetivo de asegurar la existencia de Fidel Castro en el poder. Nada resolvió en Cuba el servilismo ni el gran subsidio de cinco mil millones de dólares anuales procedentes del guanajo ruso porque luego de treinta años ese dinero nadie sabe para que sirvió que no fuera para alimentar la maquinaria represiva y propa-gandista cubana.
Pero ese guanajo se dio cuenta después de treinta años que era un pavo ruso y no cubano y todo se vino abajo, el subsidio se acabó y ¿Qué sucedió con los supuestos logros de la revolución cubana? ¡Se vinieron abajo junto con los guanajos rusos! Luego entonces para los castristas, incluso para el propio Fidel los soviéticos eran una partida de canallas, traidores y de tecnología troglodita; el propio Fidel Castro se mofó de los soviéticos denigrando los productos que exportaban para Cuba. A partir de que los guanajos dejaron de regalarle dineros para su exagerada manutención pasaron de ser solidarios, a ser repugnantes traidores e idiotas colorados; así fue que entonces la dirección castrista se dio cuanta que sin los rusos tenían que echar mano a una mutación del sistema capitalista para ver si podían a duras penas encontrar otro guanajo. En ese momento comenzó la dura realidad, sin dinero, sin créditos y sin producción nacional no podrían llegar muy lejos, he ahí que implantaron el “periodo especial en tiempos de paz”, un sistema de castración nacional, de hambruna y falta de todo lo básico para vivir, con la esperanza de no llegar a lo que ya se había calculado que podrían llegar si no se encontraba rápida-mente el próximo guanajo, “La opción cero”.
Por poco llegan a la temida opción cero; de hecho estuvieron en el umbral. La proble-mática fue tan grande que hasta ahora no se puede entender cómo llegaron a superar tamaña crisis; fueron los días en que el embargo americano comenzó a llamarse “Bloqueo” y los traidores cubanos fueron considerados trae’dólares. Los apagones eran el pan nuestro de cada día, ya no se les decía apagones sino, alumbrones; la cajetilla de cigarrillos que otrora costaba un peso con sesenta centavos llegó a costar veinte, la carne de puerco cuarenta pesos la libra y así poco a poco los productos de la canasta básica se fueron del parque, se extinguieron sin remedio; y para rematar la crisis, el valor del dólar americano se disparó y llegó a cotizarse a 120 pesos cubanos la unidad. Comenzaron las crisis migratorias, el maleconazo, la lancha de regla, la masacre de Tarará, Guantánamo, tuvieron que sentarse con los americanos y hacer acuerdos de todo tipo, asesinaron jóvenes negros inocentes, mataron en pleno vuelo a bordo de dos aviones de papel a cuatro cubanos residentes del sur de la Florida y por poco el castrismo se viene abajo por la furia de la crisis y los efectos del embargo, fue entonces en verdad que el hoy vilipendiado embargo americano funcionó. Luego después, a punto de colapsar el castrismo, por obra y gracia de la mentalidad maquiavélica de Fidel Castro, aprecio el próximo guanajo.
Una vez el nuevo guanajo asegurado se comenzó a dar marcha atrás a las medidas capitalistas que hicieron obligados por la circunstancias, se sintieron seguros nueva-mente y comenzó la represión a endurecerse como de costumbre, porque a la sazón ya los opositores salían de abajo de cualquier piedra ¡Fue en la crisis del mal llamado periodo especial en tiempos de paz donde mas opositores y periodistas independientes apare-cieron! Se cerraron la mayoría de los restaurantes y negocios creados por la iniciativa capitalista nacional, los que no cerraron se tuvieron que adaptar rápidamente a la nueva dinámica del régimen o en su defecto se convirtieron en una sombrilla de éste. Fueron reprimidos con fuerza la mayoría de los cubanos y para cerrar la contienda que a todo vapor comenzaron a raíz de encontrar al nuevo guanajo, implementaron la primavera negra, con ella pusieron el candado a la apertura coyuntural y la crisis nacional y de hecho, comenzó a funcionar de nuevo el sistema castrista, esta vez muy bien engrasado por el subsidio de Chávez.
Ahora bien, si el sistema que existe en Cuba ha demostrado que con un solo guanajo es suficiente para mantener engrasada la maquinaria castrista ¿Qué podrían hacer con dos guanajos bien alimentados? Pues bien, creo que con dos guanajos Fidel Castro seguirá gobernado a Cuba hasta después de muerto pero, ¿De dónde va a sacar el castrismo otro guanajo? Creo que esa pregunta sobra; Fidel Castro no busca los guanajos, los guanajos le caen a Fidel del cielo. El próximo guanajo con toda seguridad va a ser el nuevo inquilino de La Casa Blanca con todo y su glamorosa Secretaria de Estado quien ya se apresuró a decir que todos los esfuerzos hechos por la anterior administración para debilitar a los castristas amen del subsidio chavista van a ser tirados a la basura.
Estados Unidos era hace algún tiempo amen del llama-do “Bloqueo” el séptimo socio comercial de Cuba, ahora, amen también del tal “Bloqueo” pasó a ser el quinto. Supongamos que entre las medidas unilaterales anunciadas por el próximo guanajo entre el otorgamiento de créditos al régimen de La Habana. De suceder esto, sería ya el último aldabonazo a la libertad de Cuba, la luz al final del túnel que todos veíamos pasaría a ser la del Morro de La Habana y Obama, aparentemente la quiere apagar. Muchas gracias.
Una vez el nuevo guanajo asegurado se comenzó a dar marcha atrás a las medidas capitalistas que hicieron obligados por la circunstancias, se sintieron seguros nueva-mente y comenzó la represión a endurecerse como de costumbre, porque a la sazón ya los opositores salían de abajo de cualquier piedra ¡Fue en la crisis del mal llamado periodo especial en tiempos de paz donde mas opositores y periodistas independientes apare-cieron! Se cerraron la mayoría de los restaurantes y negocios creados por la iniciativa capitalista nacional, los que no cerraron se tuvieron que adaptar rápidamente a la nueva dinámica del régimen o en su defecto se convirtieron en una sombrilla de éste. Fueron reprimidos con fuerza la mayoría de los cubanos y para cerrar la contienda que a todo vapor comenzaron a raíz de encontrar al nuevo guanajo, implementaron la primavera negra, con ella pusieron el candado a la apertura coyuntural y la crisis nacional y de hecho, comenzó a funcionar de nuevo el sistema castrista, esta vez muy bien engrasado por el subsidio de Chávez.
Ahora bien, si el sistema que existe en Cuba ha demostrado que con un solo guanajo es suficiente para mantener engrasada la maquinaria castrista ¿Qué podrían hacer con dos guanajos bien alimentados? Pues bien, creo que con dos guanajos Fidel Castro seguirá gobernado a Cuba hasta después de muerto pero, ¿De dónde va a sacar el castrismo otro guanajo? Creo que esa pregunta sobra; Fidel Castro no busca los guanajos, los guanajos le caen a Fidel del cielo. El próximo guanajo con toda seguridad va a ser el nuevo inquilino de La Casa Blanca con todo y su glamorosa Secretaria de Estado quien ya se apresuró a decir que todos los esfuerzos hechos por la anterior administración para debilitar a los castristas amen del subsidio chavista van a ser tirados a la basura.
Estados Unidos era hace algún tiempo amen del llama-do “Bloqueo” el séptimo socio comercial de Cuba, ahora, amen también del tal “Bloqueo” pasó a ser el quinto. Supongamos que entre las medidas unilaterales anunciadas por el próximo guanajo entre el otorgamiento de créditos al régimen de La Habana. De suceder esto, sería ya el último aldabonazo a la libertad de Cuba, la luz al final del túnel que todos veíamos pasaría a ser la del Morro de La Habana y Obama, aparentemente la quiere apagar. Muchas gracias.
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