lunes, 23 de marzo de 2009

Los engañados felices

Analizando con paciencia el comportamiento de la Unión Europea y los gobiernos latinoamericanos, parecen haberse hecho del conven-cimiento mutuo de que es cierto que Cuba no tiene oposición y que los que se oponen al gobierno castrista no son otra cosa que quinta-columnistas al servicio de Los Estados Unidos. Este razonamiento muy bien manipulado por la Habana parece estar dando resultados según la respuesta ofrecida a la sucesión dinástica cubana. No puede haber otra explicación. Los gobiernos del orbe parecen estar convencidos ya de eso. Los últimos en arrimarse a la hoguera de esa infame mentira fueron los gobiernos de Costa Rica y El Salvador. Si quedaba alguna duda con respecto a la efectividad de la propaganda desinformadora castrista aquí parece estar la respuesta. Ningún país latinoamericano parece haber tomado en cuenta, no tan solo a los presos políticos que se pudren en las mazmorras del régimen acusados falsamente de ser lacayos del Imperio, sino, que ni siquiera han tenido en cuenta el tipo de gobierno que impera en la Habana. No se han fijado que en Cuba no existe ni siquiera la sombra de la libertad que respiran ellos en sus países.

¿Cómo pueden estar tan ciegos? Ah, eso nadie lo sabe. La evidencia está ahí, a la vista de todos. Tienen un gobierno en Cuba hace ya cincuenta años sin ningún tipo de movimiento, anclado al poder sin una sola señal de libertad, y cuando hacen un movimiento, no importa que sea marcha atrás, sale todo el mundo a felicitarlos. ¿Cómo pueden llamar cambios a darle al pueblo el derecho de hablar por teléfono cuando en el mundo civilizado hablar por teléfono no es siquiera un derecho sino, una necesidad? ¿Cómo pueden llamar cambios positivos a darle el derecho al campesino al usufructo de la tierra cuando cultivarla y explotarla ha sido un derecho universal desde la llegada del hombre a la tierra? ¿Cómo pueden considerar cambio positivo el darle el derecho a un pueblo a entrar en un hotel nacional, a un restaurante o una tienda cuando eso en ningún lugar del mundo es derecho, sino que es un modo de vida, es natural y vital? Sin embargo, en el mundo no se cansan de considerar que los cambios en Cuba son positivos…No, eso no puede ser considerado positivo porque nunca debieron ser prohibiciones y el mundo lo sabe. Esa es la muestra, esos supuestos cambios son la muestra de lo que ha sido Cuba durante los últimos cincuenta años; estábamos y estamos tan oprimidos que la libertad de hacer una simple llamada inalámbrica es considerada por el mundo un derecho, aun más, es considerado casi un trascendental cambio.

Todos consideran que Raúl Castro es la antesala de la libertad y la democracia en Cuba por haber llevado a la práctica estos cambios, pues bien, en esta breve nota voy a tratar de explicar el sentido de estos trascendentales cambios: Ningún cubano en Cuba sin la ayuda extranjera puede disfrutar de tan altruistas cambios. Todos estos supuestos cambios no son otra cosa que una cortina de humo. Si tenemos en cuenta solamente que ninguno de ellos se puede disfrutar si no se obtienen con la moneda enemiga, entonces se podrá comprender la magnitud de los supuestos cambios. No se puede comprar el móvil en moneda nacional sino, en dólares, tampoco se puede pagar el servicio en moneda cubana. No se puede disfrutar de las instalaciones de un hotel sin dólares, pero aun teniéndolos se debe justificar la procedencia, el uso y el disfrute. No se puede disfrutar del alquiler de un auto si este no se paga en dólares, también aquí hay que justificar con creces la procedencia del dinero y el motivo del uso y el disfrute. Tampoco se puede cenar en un restaurante con moneda nacional, solo en dólares. Pero lo mas significativo de todo esto es que los cubanos no tienen el derecho al salario en moneda fuerte y si llevamos al cambio oficial el peso cubano a moneda convertible el salario de un cubano promedio no supera los diez dólares mensuales, entonces ¿de qué vale haber aprobado los trascendentales cambios si son ciertamente una quimera alcanzarlos?

Si ponemos en una balanza los derechos y las prohibiciones en Cuba, entonces para hablar de cambios debemos primero limpiarnos las fisuras de la boca. La educación en Cuba es gratuita pero, la primaria y le enseñanza media es totalmente doctrinaria y la superior, solo para los revolucionarios. Esto significa sencillamente una cosa, que la educación en Cuba más que un derecho es una herramienta política del sistema. La medicina es gratuita, pero, para ingresar a un cuerpo sanitario debes llevar todos los artículos de primera necesidad, incluso las medicinas, y la mayoría de ellas solo se obtienen con divisas, luego entonces, ¿Qué cosa es la salud en Cuba? ¡Una herramienta de manipulación propagandística del régimen para justificar su desgraciada existencia!

A parte de esas dos herramientas (la educación y la salud) que son, dicho sea de paso, las más grandes conquistas del castrismo en Cuba, las más emblemáticas, todo lo demás es prohibido. Se prohíbe todo lo conveniente a derechos inalienables, inclusive, la sola distribución, manipulación y estudio del manual de la declaración universal de derechos humanos redactado por las Naciones Unidas y firmado por el gobierno cubano es considerado un delito punible con penas de cárcel. Luego, si solo este aspecto de los derechos del hombre es considerado una afrenta y una violación de la ley en Cuba ¿Qué podremos esperar para todo lo demás? Luego entonces, tratar de explicar los demás aspectos de la vida que son una violación a la ley es absurdo, redundante y hasta cursi. Es muy fácil ver una viga en el ojo de los pueblos oprimidos por la izquierda y decir que es tan solo una paja por solidaridad pueril y complicidad ideológica, cuando no nos gustaría ver siquiera una lágrima en los nuestros. A esos que viven hoy felices de ser engañados y se regocijan de sentarse a la diestra de la bestia les recordamos que no hay nada más socorrido que el transcurso del tiempo y la vitalidad de la historia, a esos que hoy no quieren ver el sufrimiento de Cuba les llegará el día en que tengan que arrepentirse, quiera dios no sea demasiado tarde. Muchas gracias.

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