lunes, 30 de junio de 2008

"Sombras del pesimismo"

"Que el pesimismo no cabalgue por encima de nuestras esperanzas, porque nuestras esperanzas deben ser tan firmes como nosotros queramos que sean"

Los cubanos somos los sacos de boxear de la política mundial, cada ves que alguien se le ocurre entrenar, nosotros somos los que aguantamos el golpe. Esta no es una característica de ahora, esto es ya histórico. Desde que el conflicto revolucionario desembarcó por playa Las Coloradas lo único que hemos recibido los cubanos son golpes, vienen de cualquier parte, en ocasiones vienen hasta del cielo. Solo basta que alguna parte en conflicto necesite un punchig bag para que de inmediato se piense en los cubanos. Si se necesita alguien para morir en Argel, allá van los cubanos, en Etiopia, allá van los cubanos, en Viet Nam, Angola, Grenada, donde quiera que haga falta un muerto, allí siempre habrá un cubano, sin embargo, donde mas golpes aguantamos es en el conflicto castro/americano, ahí no hay quien nos quite el ramalazo.

Cada ves que a Estados Unidos se le ocurre una sanción contra el régimen de la Habana, los cubanos pagan, y viceversa. Los golpes que se tiran de ambas partes siempre los reciben los cubanos. En el 2004 a Bush se le ocurrió sancionar a Castro limitando los viajes a Cuba cada tres años, solo a familiares allegados y Castro respondió con un impuesto del veinte por ciento a las remesas, ¿Quiénes se perjudicaron? Bueno como siempre, los cubanos, los de acá porque les impusieron una multa como castigo por vivir en Estados Unidos, y los de allá por tener familias en Estados Unidos.

Es verdaderamente un abuso la extorsión por la que atraviesa el pueblo de Cuba en el exterior solo por reclamar el derecho de ayudar a sus seres queridos. Las tarifas telefónicas, los tramites migratorios, los de visita y los costos de las remesas son los mas altos del Mundo, sin embargo, no nos cansamos de recibir golpes, aparentemente somos una especie humana adaptada a la trompada, concientes de que nuestro destino es sufrir, vivimos en una especie de estatus quo donde el movimiento parece no tener sentido. Allá nadie hace nada por cambiar, esperan pacientemente que los cambios vengan del cielo, aquí, luchamos arduamente para que los de allá tengan la reserva necesaria para la espera.

Todos los años hay algo nuevo, la imposición de alguna disposición que a la corta siempre fastidia a los cubanos. Cada ves que a un político se le ocurre hacer algo trascendental para robar pantallas, allá van los cubanos y pagan la consecuencias. Es verdad que se convirtieron en un relajo los viajes a Cuba, es cierto que de humanitario ya no tenían nada, pero hay que tener una cosa bien presente y es la siguiente: Hace mucho rato que los cubanos dejaron de ser refugiado políticos y se convirtieron en una masa pública vital para el mantenimiento de la política cubana. Desde que se firmaron los acuerdos Alarcón/Tarnof en el año 1994 los cubanos dejaron de emigrar por motivos políticos, a partir de ese momento cualquiera con la capacidad de llenar una planilla tiene la oportunidad de convertirse al momento en una maquina recuperadora de divisas. Tal es así que existen cientos de expresos políticos varados en Cuba por falta de una visa americana, hay hasta combatientes del Escambray pudriéndose allá porque son considerados por la nueva política americana como terroristas, sin embargo, un militante del Partido comunista se gana la lotería de visas y entra en Estados Unidos aunque al año y un día esté visitando Cuba de nuevo con las alforjas llenas de dineros.

Hay que estar conciente de la realidad actual, ya Cuba no es la de antes, aquellos que tienen congelados en su memoria recuerdos de una Cuba hermosa con una sociedad sublime, hospitalaria, alegre y fresca deben poner los pies en la tierra y comprender que esa Cuba se murió hace un buen rato, ahora Cuba es otra, es la Cuba involutiva, inmóvil, desesperanzada en espera de un imponderable, en consecuencia la prioridad no es la política sino, la sobre vivencia. Hay que estar concientes de esta realidad y actuar en consecuencia.

No es un problema de pesimismo, es ver las cosas tal y como se presentan. En Cuba hay una sociedad castrada y no podemos resistirnos a esa realidad; pocos son los que llevan la honra de todo ese pueblo sobre sus hombros, y esos pocos desgraciadamente no los considera nadie, si el mundo libre que tiene la forma de ayudarlos y solidarizarse con ellos le da la espalda ¿Cuánto mas puede hacer una sociedad llena de miedos y con las manos atadas?

La política a seguir con Cuba debe ser otra, otra estrategia debe ponerse en practica ya, de lo contrario, la perderemos para siempre ¿por qué apresurarse en una nueva estrategia para Cuba? Porque todo parece indicar que el Pueblo americano se va a equivocar y para enero del año que viene todos los gobiernos totalitarios del Mundo van tener un aliado en la Casa Blanca y Cuba será la primera. Yo veo al gobierno de Raúl Castro enviando médicos y entrenadores deportivos a Estados Unidos, veo becas cubanas en abundancia para los pobres americanos, veo un futuro desastroso para la libertad de Cuba y veo para finalizar, una casería de brujas en contra de la diáspora cubana ¿Qué los americanos no aguantan eso? Bueno, eso decían los venezolanos.

La nueva política debe ser todo lo contrario de lo viejo, es decir, inundar la patria con todo lo que la libertad y la democracia provee al ser humano, cancelar todas las restricciones de viaje, abrir la posibilidad de mandar cualquier cantidad de dineros y que la comunicaciones sean mas fluidas, liberar las compañías de celulares para que puedan tener repetidoras en Cuba, en fin, abrirse a Cuba como las alas de una paloma, hacerlo antes que sea una política oficial de la casi segura nueva administración, que sea una iniciativa para una Cuba libre, una estrategia a favor de la libertad de Cuba y no una victoria mas del castrismo sobre “el Imperio” Hay que hacer que los cubanos despierten, de no aprovechar el poco tiempo que no queda, entonces para el año que viene va a ser demasiado tarde.

Que el pesimismo no cabalgue por encima de nuestras esperanzas, porque nuestras esperanzas deben ser tan firmes como nosotros queramos que sean. Muchas gracias.

Luís Alberto Ramírez - Miami

2 comentarios:

Anónimo dijo...

buen articulo Luis..lo unico que tengo que compartir es que si los cubanos hemos recibido palos por todos lados es porque nos hemos dejado dar los palos...

y sobre las elecciones,siempre pienso..."me preparo para lo peor,y espero lo mejor"....

saludos

Luis Alberto Ramírez dijo...

Tu obtimismo me da vida...desgraciadamente yo soy todo lo contrario, me preparo solo para lo que creo que viene cuando estoy convencido que viene.

Nos hemos dejado golpear, ese es el punto. Un abrazo. Luis