sábado, 28 de marzo de 2009

¿Que levanten el embargo?

Con pocas palabras el señor Julio María Sanguinetti ha tratado de explicar a los que nos oponemos al levanta-miento del embargo lo factible de apoyar un eventual cese de las sanciones. Dice Sanguinetti lo siguiente y cito:

“Si algo ha aprovechado el régimen, habilísimo siempre en su propaganda, es ese embargo, bautizado como "bloqueo" para suscitar la idea de una pobre isla rodeada de buques norteamericanos y marines al acecho. Poco se recuerda que el mundo entero es libre de comerciar con Cuba, comprar y vender alimentos o medicamentos y que si Cuba permanece pobre y tan monocultivadora como en 1959, es por su régimen y nada más que por su régimen. Sin embargo, no existe esta real conciencia en el mundo, donde el prejuicio antiyanqui -alimentado hasta el delirio por los errores del anterior presidente- aporta también lo suyo.
Nos ha faltado elocuencia para hacer entender a los parlamentarios norteamericanos partidarios del embargo y a los viejos líderes del exilio cubano que nada ha sido peor para ellos que la ominosa medida de cierre. Sin embargo, los jóvenes de origen cubano, ya nacidos en EE UU, lo entienden así.
Con el fin de embargo, EE UU y el exilio ganarían autoridad moral para reclamar cambios y le habrían quitado al régimen la vieja bandera nacionalista en que sobrevive envuelto. Ya no habría pretextos y en un contexto como el actual, con una Venezuela disminuida en su potencia y con pocos mecenas dispuestos a ayudar, la propia necesidad podría estimular la idea de comenzar a hablar -aunque sea comenzar a hablar- de la anhelada transición. Podrá parecer poco, pero hoy es lo que está al alcance de quienes queremos ver algún día una Cuba democrática.”


Es comprensible la posición del exPresidente pero, yo tengo otra opinión que quizás es antagónica con lo que piensa él pero también tiene su trasfondo.

Es verdad que Castro se apoya de las sanciones a su régimen para tergiversar la verdadera lucha de los cubanos y dar a entender que el conflicto de Cuba no es entre cubanos sino, un problema bilateral con Estados Unidos. Es verdad que los países de América Latina no apoyan más a los cubanos que desean la libertad porque entienden que las sanciones de los americanos son letales, y ponerse en contra de Castro de alguna manera se vería como una postura a favor del “Imperialismo Yanqui”. También no es menos cierto que el embargo le ha dado la posibilidad a Castro de encarcelar a cuanto opositor pacifico se le ha enfrentado con la justificación de trabajar a favor de una potencia extranjera, sin embargo, ¿mejoraría en algo al Pueblo de Cuba el levantamiento unilateral del embargo sin concesiones por parte de la tiranía?. Los hechos son evidentes, yo creo que no, ¿ayudó en algo a los cubanos los chorros de dineros recibidos por Castro de manera constante por espacio de treinta años provenientes del campo socialista? Los datos no mienten, Cuba recibió de la Unión Soviética la increíble cifra de 5 mil millones de dólares anuales; con esa cantidad se pudo fácilmente derrumbar a la Isla completamente y fabricar una nueva, pero el objetivo no es en ninguna forma beneficiar al Pueblo de Cuba sino, mantener la dictadura a como de lugar, y paradójicamente la necesidad y el hambre son factores sumamente importantes para lograr ese propósito. El levantamiento de las sanciones por parte de Estados Unidos no traerá beneficios tangibles para el Pueblo cubano, de hecho Estados Unidos era el séptimo socio comercial de Cuba aunque parezca increíble, ahora subió a la cuarta posición. Unas 110 empresas americanas de 19 Estados de La Unión se dieron cita en Cuba en la próxima pasada XXI Feria Internacional de La Habana, se firmaron contratos solamente en ganado vacuno por la cantidad de 50 millones de dólares, y otros contratos por la misma cifra en pollo, frijoles y hasta en chicles Adams. Ya Cuba había hecho hasta esa feria compras a Estados Unidos por valor de 500 millones de dólares; solamente en el 2003 se realizaron gestiones de compras a la Unión americana por valor de 343,9 millones de dólares en mas de 300 rubros; hace meses el empresario John Parke Wright, presidente de la compañía del mismo nombre del estado de la Florida le entregó a la Tiranía mas de 50 cabezas de ganado.

En octubre del 2003 la compañía norteamericana se convirtió en la primera empresa ganadera de Florida en suministrar ganado a la isla con una operación de venta de 250 cabezas de tres variedades para la producción de carne.

Soya, trigo, pollos, frijoles, maíz y otros productos comestibles comenzaron a llegar a Cuba a partir de diciembre del 2001, gracias a una enmienda que logró eliminar este rubro del embargo a la isla impuesto hace más de cuatro décadas.

Con los convenios (los de Abril del año 2004) sumaron $ 718 millones el monto de compras cubanas a EEUU desde la apertura del intercambio.

Grandes compañías como FC Stone, Archer Daniels Midland de Illinois, la Federación Arrocera de Estados Unidos --que representa al 85 por ciento de los productores del grano--- están actualmente firmando contratos con Castro. En la Habana en el mes de Abril se firmó un nuevo contrato por la compra de $ 100 millones mas.

Según el Ministro de ALIMPORT, Cuba no sólo compra al contado a Estados Unidos, sino que lo hizo en operaciones con Francia, Nueva Zelanda y Argentina. Mientras, se respetaron puntualmente los compromisos con sus otros proveedores.

Durante las conversaciones de este año, la delegación norteamericana, compuesta por representantes de 172 compañías se comprometió a dar un impulso aun mayor a este tipo de colaboración. Cabe entonces preguntarse ¿Dónde va a parar tanto alimento, por qué todavía existe el racionamiento, y por qué la creación de un mercado paralelo exclusivista y discriminatorio que ahoga la existencia del País? ¿Qué beneficios ha traído para los cubanos estas compras? De hecho los cubanos para comprar un pollo o para comerse un bistec tienen que esperar que algún familiar en el extranjero le mande dólares, de lo contrario tienen que jinetearlo en las calles de La Habana. De manera que Raúl Castro, si quiere que le levanten las sanciones, es solamente para ganarle su última batalla al “Imperialismo” no para mejorar la vida del Pueblo cubano, sin embargo, existen dos factores muy importantes que me obligan a estar a favor de este débil y vilipendiado Embargo, y en total desacuerdo con Sanguinetti. El primero radica en no darle la victoria moral a Fidel Castro con un levantamiento unilateral de las sanciones que no mejorará en nada la oprimida vida del pueblo cubano, de hacerlo la doctrina castrista tomaría tanta fuerza en Cuba que sus seguidores, aun después de su muerte se negarían rotundamente a cambiar el sistema social, de hecho ya, con el levantamiento de las presiones, tendrían todas las herramientas necesarias para manejar su capitalismo de Estado por cincuenta años más… Por otra parte y como segundo argumento tendríamos que con el levantamiento de las sanciones vendrían las líneas de crédito y esto endeudaría tanto a Cuba con la banca americana que los cubanos jamás, aunque vendan la Isla en subasta, podrían pagar tal deuda… Los hermanos Castro le deben dineros a las once mil vírgenes, sin embargo, este dinero no lo debe a Estados Unidos sino, a gobiernos que al margen de las instituciones crediticias internacionales se arriesgaron a hacer prestamos a una dictadura de extrema Izquierda radical, cosa que no ha hecho (hasta ahora) este país, de manera que lo único que se pierde en caso de exigencia es una mejor relación comercial, no futuros acuerdos de créditos con instituciones bancarias internacionales, ahora, si en vida de Castro se hace esa concesión, o para obtener de Raúl apertura al estilo Chino, que se olviden los cubanos de una vida mejor, porque una deuda tan grande con el FMI y el BM hundiría tanto a Cuba que jamás saldría de la pobreza en que se encuentra. La alta política americana quizás sabe esto, y tal vez por un problema de estrategia regional violan el embargo de muchas formas y posponen los artículos tres y cuatro de la ley Helms, pero nunca abren la posibilidad de dar créditos frescos a Castro, porque saben que de hacerlo, la esperanza de una vida mejor para los cubanos después de los Castro se desvanecería como desvanecida está la esperanza de que Fidel cambie antes de morirse. Para mi el débil y vilipendiado “embargo” americano es infuncional e insuficiente, pero es un arma de presión, la única herramienta que tienen los cubanos libres para evitar que Fidel Castro siga dirigiendo los destinos de Cuba después de Muerto. Muchas Gracias.

1 comentario:

SABALE dijo...

buen blog amigo
http://www.sabaleplus.blogspot.com/